Descripción
Su alto contenido en fibra ayuda a combatir el estreñimiento, disminuir la posibilidad de sufrir enfermedades intestinales y saciar el apetito.
Además, son ricos en vitaminas B1, B2, B9, C, E y K, así como en minerales como calcio, zinc, magnesio, hierro, potasio y fósforo que ayudan a mejorar a las defensas del organismo. Destacar que su aporte de hierro los convierte en un alimento ideal para aquellas personas que padecen de anemia.
Por último, recomendar que se pueden utilizar en multitud de preparaciones más allá de cocidos y estofados. Por ejemplo, el hummus o el falafel son algunos de los platos más interesantes y sabrosos. Además, para que la comida salga mucho más exquisita deberemos poner los garbanzos en remojo unas 12 horas antes de prepararlos con agua del tiempo.
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